A nivel mundial, las emisiones fugitivas (EF) se están convertido en una preocupación por su impacto negativo en la productividad, el medio ambiente y la salud. Estas emisiones no sólo son un problema medioambiental y económico, sino también sanitario. Aunque son muy pequeñas y casi siempre invisibles, las EF son la principal fuente de exposición continua para los trabajadores, además de la gran contribución al calentamiento global. 

¿Qué son las Emisiones Fugitivas?

En términos simples, las emisiones fugitivas son liberaciones no deseadas de gases de efecto invernadero (GEI) hacia la atmósfera. Estas emisiones que se escapan provienen de tanques de almacenamiento, tuberías, pozos, aparatos u otros activos presurizados comúnmente utilizados en actividades industriales. Aunque la mayoría de estas emisiones provienen de refrigerantes y gas natural, también pueden incluir GEIs como dióxido de carbono, metano, perfluorocarbonos, hexafluoruro de azufre y trifluoruro de nitrógeno.

¿Por qué no son tan conocidas? 

La naturaleza de las EF dificulta su evaluación, pero es sumamente importante ya que representan aproximadamente el 5% de las emisiones globales. Para ponerlo en perspectiva, la combustión de gas produce aproximadamente la mitad de co2 que el carbón

Estas emisiones pueden acumularse rápidamente debido a que su impacto a menudo pasa desapercibido. De hecho, el 20% de las 570 millones de toneladas métricas anuales de emisiones mundiales de metano son fugitivas.

Prevención de emisiones fugitivas

Aunque las emisiones fugitivas ocurren en diversas industrias, su reducción es posible mediante acciones intencionales. No solo beneficia al planeta, sino que también reduce costos y fomenta un entorno de trabajo más seguro para los empleados de todos los sectores industriales.

Garantizar que todos los equipos estén diseñados para eliminar o reducir las emisiones fugitivas es la mejor manera de evitarlas. Las empresas deben realizar seguimientos para reportar periódicamente sus emisiones, así como mantenimiento y revisión adecuados. Esto permitiría una mayor transparencia y responsabilidad. 

Ética en emisiones fugitivas

Al reducir las emisiones fugitivas, las empresas tienen la oportunidad de actuar de manera proactiva y transparente a la crisis del cambio climático con pasos tangibles. Esto lleva a resultados medibles no solo para el medio ambiente, si no también para el negocio. Eliminar las EF es una responsabilidad casi obligatoria: las regulaciones cada vez más estrictas, aparte de que su medición y reducción es necesaria para mantenerse competitiva en la actualidad. 

Para saber más, lee nuestro blog: Emisiones Fugitivas. 

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