Para comprender la noción de descarbonización hay que primero considerar las consecuencias derivadas del calentamiento global, esta problemática hace un llamado a la acción para implementar medidas enfocadas en reducir las emisiones de efecto invernadero. El aumento de emisiones es tan alarmante que el año pasado la Tierra alcanzó 417.22 ppm (partes por millón), muy cerca de llegar a la barrera de 450 ppm, lo que aumenta la probabilidad de un incremento de la temperatura terrestre por encima de los 2 °C y la barrera se podría cruzar después de tan solo 15 años.
Una de las estrategias más adecuadas para enfrentar esta problemática es la reducción de emisiones, dado que el uso masivo de combustibles fósiles es uno de los principales agentes del cambio climático. La descarbonización se define como un proceso que busca reducir las emisiones de efecto invernadero.
Definiendo el Concepto de Descarbonización
Es importante destacar que este concepto puede ser referido por otros para explicar una idea similar, pero que no significan exactamente lo mismo. Por ejemplo, la transición energética, que consiste en una transformación del modelo energético para dejar el consumo de combustibles fósiles (este punto lo comparte con la descarbonización), sin embargo, la transición energética también implica el pasa de una estructura altamente cerrada, centralizada y jerarquizada a una más abierta, descentralizada y flexible.
Por otro lado, la descarbonización está asociada a otros conceptos como la neutralidad de carbono, compensación de emisiones y aumento de la eficiencia, para aclarar este asunto hay que entender que la descarbonización se materializa en objetivos, y estos a su vez requieren de estrategias donde el carbono neutro, la compensación y la eficiencia energética hacen parte de dichas estrategias.
Cuantificando el concepto, la descarbonización es la búsqueda de una disminución neta del 80% al 100% en las emisiones de efecto invernadero para el 2050 o si se puede, antes. Para lograr este objetivo, es importante considerar las emisiones por sector, de esa manera se puede llevar a cabo un proceso de reducción más efectivo. No existe una solución única o sencilla para enfrentar el cambio climático, deben desarrollarse múltiples alternativas enfocadas en cada sector.
¿Cuáles son las emisiones de efecto invernadero por sector?
Primeramente, el uso de energía abarca casi las tres cuartas partes de las emisiones, aproximadamente una cuarta parte emerge de la agricultura, el uso de la tierra y el sector de alimentos; y el 8% restante de industria y residuos.
La energía (electricidad, calor y transporte) incluye el 73,2% de las emisiones, donde el transporte, edificios e industrias son los principales contribuyentes. En los procesos industriales directos la mayoría de las emisiones proviene del cemento y la petroquímica. En cuanto a los residuos, las aguas residuales y vertederos son una fuente importante de metano. Por último, en el sector de agricultura el ganado produce metano gracias a la fermentación entérica y el estiércol genera óxido nitroso al descomponerse; también se puede mencionar las emisiones de dióxido de carbono derivadas de la quema de cultivos y deforestación.
¿Cómo se desarrolla el proceso de mitigación de emisiones?
La transición a la reducción de emisiones consta de varios aspectos. En primera instancia, se debe descarbonizar el sector de energía que representa la fuente de casi las tres cuartas partes de las emisiones totales de efecto invernadero por año. Debe apuntarse a medidas de eficiencia energética. Estas medidas deben lograr reducir el consumo en un 7.5% para el año 2050 (en comparación con el 2020). Esto se puede alcanzar si se reduce el uso de combustibles fósiles de un 79% a un 23%, y, además, si se incrementa el aprovechamiento de fuentes de energía limpia del 26% al 66% en el periodo 2020-2050.
Adicionalmente, es necesario optimizar el transporte donde se puedan usar fuentes de energía renovables con cero emisiones al evitar los combustibles a base de carbono.
También se deben reducir las emisiones que se derivan de la industria y procesos agrícolas. Para el sector agrícola en lugar de almacenar el estiércol este se puede convertir en biogás o emplearse como abono, y en el caso de la contaminación generada por los suelos agrícolas es necesario optimizar el uso de los fertilizantes. Y en lo que respecta al sector industrial las medidas de descarbonización incluyen la innovación tecnológica de los equipos, electrificación de usos térmicos, uso de energías renovables e hidrógeno, captura de CO2 y economía circular.
Por otra parte, se tiene que las áreas urbanas representan entre el 71% y 76% de las emisiones a nivel mundial, entonces, para alcanzar una reducción profunda de emisiones se debe comenzar con las ciudades donde se sugiere hacer hincapié en los siguientes puntos:
Electricidad
Eliminar por completo los combustibles fósiles de las redes eléctricas.
Edificios
Los edificios existentes se pueden descarbonizar mediante modificaciones y los nuevos edificios se pueden construir desde una base completamente descarbonizada, ahí deben tenerse en cuenta los sistemas de calefacción y refrigeración, y el mejoramiento de la eficiencia energética.
Transporte
Este incluye cambios en el tipo de combustibles, el uso de vehículos eléctricos, así como también la acción de los gobiernos sobre el sistema de transporte público para reducir las emisiones asociadas con el transporte.
Residuos
Esto se logra disminuyendo el volumen de residuos que son enviados a los rellenos sanitarios mediante estrategias de reciclaje.
Industria
La industria puede ayudar con la descarbonización al incluir medidas de eficiencia energética dentro de sus operaciones, así como al cambiar a técnologías cuyo combustibleno genere emisiones de dióxido de carbono (ej. hidrógeno verde, electrificación)
¿Cuáles son las fuentes de energía renovables y acciones para lograr la descarbonización?
Existen diversas fuentes alternativas de energía con miras a la reducción de emisiones de efecto invernadero:
Energía solar
Se aprovecha la radiación solar para producir energía fotovoltaica como fuente de energía eléctrica, y también se genera energía térmica.
Biomasa
Es una fuente de energía que se basa en el empleo de materia orgánica que sirve para generar electricidad y energía térmica. Se puede convertir en fuente de energía alternativa por medio de la producción de biogás, con sistemas de captura de gas se capturan las emisiones a medida que se descomponen los residuos.
Eólica e hidroenergía
Es una fuente eficiente que se beneficia del aumento de la velocidad del viento.
Hidrógeno
El hidrógeno verde emerge de un proceso de hidrólisis que utiliza energía solar, eólica y biomasa. Esta fuente se puede emplear en el transporte y calefacción, asimismo, se fabrican combustibles de hidrógeno como metano sintético, amoniaco y combustibles líquidos. Las pilas de combustible a base de hidrógeno son de dos a tres veces más eficientes que los motores de combustión interna convencionales.
Eficiencia energética
Se logra reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles importados.
Sumideros y compensaciones de carbono
Cuando los gobiernos aumentan los sumideros naturales de carbono, como bosques, humedales y suelos. Aparte de eso, las compensaciones de carbono con el fin de equilibrar sus emisiones, por ejemplo, mediante la compra de bonos de almacenamiento y secuestro de carbono. Se tiene que Latinoamérica y el Caribe tienen un enorme potencial para generar créditos de carbono forestales.
Eléctrificación
Existen múltiples procesos en donde se necesita energía térmica (calor) para llevarse a cabo. En la actualidad, esta energía térmica proviene principalmente de combustibles fósiles (gas natural, carbón, gasolina, etc…) generando así gases de efecto invernadero en el proceso. La electrificación se refiere al cambio de estos procesos para que la fuente de calor sea generada por electricidad y no por combustión de combustibles fósiles. La electrificación de los procesos resulta ser una buena opción para la descarbonización siempre y cuando esta energía eléctrica venga de una fuente limpia (solar, heólica, etc…).
Escrito por: Vilma Estefanía Tapias Benítez
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