Las compensaciones de carbono son acciones o proyectos que reducen la cantidad de dióxido de carbono que se libera a la atmósfera. Básicamente, las compensaciones de carbono están diseñadas para compensar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) emitidas por un individuo, empresa, producto o servicio cuando se realiza una actividad.

La compensación de emisiones de CO2 se traduce en una aportación económica equivalente a la cantidad de emisiones generadas, dirigida a un proyecto que evite o capture la misma cantidad de CO2 emitida.

Estas emisiones generadas se miden en toneladas de Co2 (tCO2) y la moneda de cambio se llama crédito de carbono, es decir: 1tCO2 = 1 crédito de carbono.

Por ejemplo, si después de reducir sus emisiones, una empresa sigue emitiendo 150 tCO2 en un año, deberá adquirir 150 créditos de carbono de un proyecto que absorba o evite la emisión de CO2.

Es importante que recalcar que la compensación de emisiones de CO2 es el último paso en el camino hacia la neutralidad en carbono. Aunque desempeña un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático, si se hace de forma aislada no es la solución. Los efectos del cambio climático sólo se combatirán si las empresas y organizaciones primero toman medidas y desarrollan estrategias para mitigar la mayor cantidad posible de las emisiones de CO2. 

Es esencial para las empresas comprender su huella de carbono para poder evaluar adecuadamente los riesgos del cambio climático. 

La huella de carbono permite cuantificar las emisiones de tu empresa en un tiempo determinado. Medir la huella de carbono permite determinar cuáles son las mayores fuentes de emisiones de tu organización y saber cuántas toneladas de CO2 genera tu empresa.

Una vez que se sabe la cantidad de emisiones de CO2 generadas, se puede diseñar una estrategia climática para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones.

Te puedes guiar en la iniciativa Objetivos Basados en Ciencia, la cuál proporciona a las empresas líneas de reducción de emisiones que están en sintonía con los objetivos del Acuerdo de París.

Las emisiones que no pueden reducirse en su totalidad son las que pueden compensarse mediante proyectos de compensación. 

Si te interesa compensar las emisiones de CO2 de tu empresa a través de un proyecto de compensación mexicano, puedes apoyar a la Reserva de la Biosfera Sierra Gorda, en Querétaro.

Cuando hayas reducido y compensado tus emisiones, es esencial comunicarlo mediante una estrategia de comunicación transparente, así se protegerá a tu empresa de Green Washing. Una buena estrategia de comunicación debe presentar información sobre el proyecto apoyado, los impactos ambientales y sociales generados y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) a los que se alinea.

Si eres una empresa interesada en medir y reducir sus emisiones, ¡sinCarbono te puede ayudar!

sinCarbono simplifica la medición de huella de carbono por medio de medición, reporte, verificación, compensación y financiamiento de ecotecnologías.

Medir la huella de carbono  e implementar un modelo de economía circular ayuda a identificar cuáles son los materiales que generan más emisiones y así poder reintroducirlos a la producción. Una vez hecho esto, tendrás una mejor idea de las mayores oportunidades para desarrollar tu estrategia de cero emisiones netas. 

¿Quieres saber como funciona? Agenda un demo.

Q&A

1. ¿Cómo sé en qué proyecto puedo compensar emisiones?

Un proyecto debe estar certificado para emitir créditos de carbono. 

2. ¿Cuáles son ejemplos de proyectos donde se compensan emisiones?

• Reforestación
• Conservación
• Proyectos de energía renovable y/o eficiencia energética
• Proyectos de tratamiento de residuos

3. ¿Cuándo es recomendable usar compensaciones de carbono?

Únicamente cuando se hayan disminuido ya mayor cantidad de emisiones posibles, se recomienda compensar aquellas emisiones que no se pueden eliminar.

4. ¿Cuánto cuesta un bono de carbono?

El precio de un bono de carbono promedio a nivel global, es de 2 USD por cada tonelada de dióxido de carbono (tCO2) reducida.