Las emisiones de activos arrendados se refieren a las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a los activos que una empresa arrienda, clasificados como emisiones de Alcance 3 en el Protocolo de Gases de Efecto Invernadero.
Estas emisiones se clasifican en función de la dirección del arrendamiento y de quién tiene el control sobre el activo, aguas arriba o aguas abajo.
Activos Arrendados Aguas Arriba
Las emisiones de activos arrendados aguas arriba se producen a partir de activos que una empresa arrienda a otra entidad, donde el arrendatario (la empresa que utiliza el activo) no tiene control financiero sobre estos activos. Esta categoría incluye las emisiones procedentes del funcionamiento de activos arrendados, como oficinas, instalaciones de fabricación o equipos utilizados en las operaciones de la empresa.
Estas emisiones pueden proceder de:
Emisiones directas procedentes de la combustión de combustible en equipos arrendados.
Emisiones indirectas procedentes de la electricidad adquirida en los espacios arrendados.
Las empresas deben contabilizar estas emisiones para evitar el doble conteo. Dado que el arrendador conserva el control financiero, el arrendatario informa de estas emisiones como parte de su inventario de Alcance 3 si no entran en las categorías de Alcance 1 o Alcance 2.
Activos Arrendados Aguas Abajo
Las emisiones de los activos arrendados aguas abajo se producen cuando una empresa posee activos que arrienda a otras entidades. En este caso, el arrendador (la empresa que arrienda el activo) debe contabilizar las emisiones asociadas a esos activos arrendados.
Estas emisiones pueden proceder de:
Emisiones procedentes de la combustión de combustible en equipos arrendados.
Emisiones de electricidad consumida en propiedades arrendadas a terceros.
En el caso de los arrendadores, estas emisiones se declaran como emisiones derivadas porque se producen después de la transferencia del control del activo al arrendatario.
Reconocer las emisiones de los activos arrendados tanto aguas arriba como aguas abajo, permite a las empresas obtener una comprensión completa de su huella de carbono e identificar áreas clave para la reducción de emisiones. Mediante el análisis de estas emisiones, las empresas pueden tomar decisiones informadas sobre las prácticas de arrendamiento, las mejoras de eficiencia energética y la colaboración con los arrendadores o arrendatarios para reducir las emisiones globales de GEI.
Comprender las emisiones de los activos arrendados en sentido ascendente y descendente es vital para las organizaciones que pretenden gestionar eficazmente su impacto medioambiental y mejorar sus estrategias de sostenibilidad en todas sus operaciones y cadenas de suministro. Si te interesa empezar a medir tus emisiones del Alcance 3, en sinCarbono te podemos ayudar.
¿Te interesa medir tu huella de carbono utilizando la tecnología a tu favor? Platiquemos, agenda una demo con nuestro equipo.